martes, 8 de agosto de 2023

LAS VÖLVAS

Heilung- Anoana


    A raíz del último post me ha apetecido escribir por aquí sobre las Sibilas, las Völvas, Pitonisas y otras profetisas, o los templos y oráculos de antiguas civilizaciones... incluida la tartesia.

  Este se lo voy a dedicar a las Völvas, aquellas mujeres con un don especial que tuvieron que mantenerse ocultas para sobrevivir al cambio tan inmenso que supuso el cristianismo.... 


“VÖLVAS”…. las brujas o videntes vikingas



    En todas las civilizaciones ha existido la creencia en el uso de artes más allá de la comprensión humana.

    En el mundo vikingo esa idea la encontramos representada en las Völvas, (del nórdico antiguo: vǫlva, «la que lleva el vǫlr, cayado o vara»), también llamada vala (del alto alemán antiguo: wala) o fjǫlkunnig («llena de conocimiento») indicando que ella conocía la magia antigua milenaria; seydr (chamanismo, magia rúnica), spá (profecía) y galdr (encantamiento, hechizo), a veces también mencionada como seiðkona («que practica el seiðr») o entre las tribus germánicas como wicce, siendo esta el origen de la palabra inglesa witch (bruja). 


    Eran lo que en castellano llamaríamos una Vidente; mujeres que tenían una capacidad extraordinaria para ver del futuro y también el pasado, (el papel de las volvas estaría más relacionado con el que tenían las pitonisas o adivinas en la antigua Grecia), Una especie de versión nórdica de un chamán o bruja, que practicaba magia conocida como Seidr (en nórdico antiguo "seior" que significa literalmente “atar”) y fueron las predecesoras de las brujas medievales. 

    Una Völva no es algo que sólo se remonta a la época vikinga, sus raíces se remontan a más de 2.000 – 3.000 años.

  Los escandinavos creían que estas mujeres tenían la capacidad de conectar con el mundo de los espíritus. Este era el modo en el que las Völvas conseguían discernir lo que estaba por venir. En algunas ocasiones, podían llegar a contactar con las Nornas, incluso cambiar el curso del destino.

    La práctica del Seidr se utilizaba sobre todo para hacer el bien y ayudar a la gente, y el Seidr no sólo se utilizaba en rituales para contactar con los espíritus, también se utilizaba a diario, podía usarse para curar heridas, crear felicidad o controlar el clima.

    Estas mujeres vivían aisladas de la sociedad vikinga, y se recurría a ellas en momentos de crisis o necesidad. 

    El motivo por el cual se aislaban del resto de la sociedad era para evitar tener ataduras familiares. 
    
    De esta forma garantizaban que, en el momento de emitir un juicio o una profecía, serían lo más imparciales posible.


    A veces, una Völva viajaba de pueblo en pueblo o de granja en granja y ayudaba a la gente, prediciendo su destino o llevando a cabo un ritual que les proporcionaría una mejor cosecha.  Probablemente se le pagaría con plata, alimentos u otros artículos de primera necesidad o de lujo.

    Una Völva también es capaz de dejar su propio cuerpo y entrar en un animal, no se sabe cómo o por qué lo haría, pero podría haber sido para viajar grandes distancias, por ejemplo a otro pueblo o lugar para observar y reunir conocimientos.

    Aunque las Völvas empleaban la magia mayormente para conocer el futuro, la magia tenía otros usos, como hacer rituales para atraer la buena fortuna, para cambiar el tiempo, o para que la caza fuera abundante.

        La práctica de Seidr también podría utilizarse de una manera más siniestra, lo que hoy llamaríamos magia negra. 



    Pudiendo ser usada para maldecir a una persona o enfermar a alguien mortalmente o para atar la voluntad de los guerreros en una batalla, hacerlos lentos, desorientados, y de esa manera ser indirectamente culpables de su muerte.

    Así, las Völvas eran temidas (por su poder y el conocimiento de la magia), 

    Esto lo demuestra una tumba del siglo IX encontrada en Noruega que aparentemente pertenece a una Völva, donde la vara está intencionalmente curvada. La razón para hacer esta curva es para “desactivar” o quitar los poderes mágicos de la misma (imagen abajo).


    Doblar o romper posesiones enterradas con los muertos servía para neutralizar sus propiedades mágicos, previniendo así, que su antiguo dueño siguiera arrojando conjuros y hechizos desde el más allá

    Un hombre también podía practicar Seidr, y se le conocería como Vidente, pero eso era muy raro, ya a que un hombre que practicase Seidr era mal visto y tildado de poco viril (se consideraba Ergi, siendo uno de los peores insultos que un hombre de la era vikinga podría recibir).

    Esto podía deberse a que el Vidente y la Vidente vestían el mismo atuendo o porque ciertos rituales podían tener un componente sexual que resultaría humillante para los hombres.

    Se podría decir que una Völva/Vǫlva era una líder espiritual o una curandera, y eran muy respetadas en la sociedad vikinga.

    Existen varios textos, tanto históricos como mitológicos, en los que se muestra un enorme respeto hacia las Völvas. 

    Uno de los casos es el Völuspá (literalmente “La profecía de la Völva”), un texto importantísimo para conocer la mitología nórdica. 

    En él, una de estas adivinas habla directamente con Odín, quien escucha atentamente las palabras de la Völva. 


    En otro texto, Odín viaja hasta las puertas del Hel para reunirse con una Völva, y que esta le cuente como evitar la muerte de su hijo Baldur.

    Las sagas también nos ofrecen información acerca de las Völvas. Por ejemplo, en la saga de Erik el Rojo, encontramos lo que podría considerarse como una descripción más realista del papel de las Völvas en la sociedad. 
    El texto muestra la importancia que se le daba a la Völva, pues Thorbjorg es recibida con honores en la villa. Además, le prestan la mejor habitación para que pueda descansar en condiciones y celebran un banquete en su honor. La saga ofrece la siguiente descripción de Thorbjorg:

«Llevaba una capa azul atada con tiras de cuero, toda ella adornada con gemas hasta el dobladillo; tenía un collar de cuentas de vidrio; cubría su cabeza una capucha negra de piel de cordero, forrada con la piel de un gato blanco. Llevaba un bastón con empuñadura de cobre incrustada de piedras preciosas. Rodeaba su cintura un cinto de yesca, de la cual pendía una bolsa grande y en esta guardaba los talismanes que necesitaba para su magia. Calzaba sus pies con peludos zapatos de piel de becerro cuyos largos y gruesos cordones terminaban en grandes botones de latón. Enfundaba sus manos en guantes de piel de gato forrados de piel blanca.»

 

     La saga de Erik el rojo relata también como las Völvas realizaban el ritual para entrar en trance, y “desbloquear” así sus habilidades.

     
1. EL RITUAL DE ADIVINACIÓN

    El ritual se celebraba en una plataforma elevada, donde se colocaba la Völva. Seguidamente, una ayudante dibujaba un circulo a su alrededor, usando la vara de la adivina.

  
    Una vez dibujado el circulo, una mujer debía entonar los varðlokkur para atraer a los espíritus. La canción debía cantarse de la forma más bella posible para que los espíritus se alegraran y ayudaran a la Völva en su ritual. Si a los espíritus les gustaba la canción, ayudaban a la Völva a predecir el futuro o a ver el pasado.

    La Völva entraba entonces en trance, lo que le permitía interactuar con los espíritus atraídos por los canticos.

    Cuando el sonido de los tambores y el canto empezara a desvanecerse lentamente, la Völva estaría entre los reinos de los vivos y los espíritus, los participantes en el círculo que asistían al ritual podrían ahora ir a hacerle preguntas sobre su destino y su futuro, uno por uno.

    No obstante, las fuentes no señalan como la Völva entraba en ese estado de trance. Se sospecha que echaban mano de sustancias estupefacientes con efectos alucinógenos (Se dice que arrojaban las semillas de Beleño o belladona al fuego y al inhalar el humo que desprendían entraban en trance), y aunque no se descarta esa posibilidad, algunos autores señalan que la volva podía entrar en trance sólo con la música que sonaba durante su ritual, acompañándola con relajantes ejercicios de respiración

   El Varðlokkur es un canto, este era cantado por la Völva o por alguna persona presente. A  diferencia del Galdr  que es un encantamiento compuesto en una métrica poética especial llamada galdralag (el cual se usaba mucho en los partos y era cantado en falsete, como una canción de cuna), el Varðlokkur no necesitaba que fuera un poema, ni llevar una métrica exacta y ni que rimase.    

    En la saga de Erik el Rojo un grupo de personas cantaban alrededor de la Völva, y así pasa en la mayoría de sagas que se nombra el uso del Seiðr, normalmente la o el practicante del Seiðr tenía un grupo de adeptos o estudiantes que le acompañaban y cantaban para ella, ayudándole con el trabajo Seiðr. 
    

El Varðlokkur tiene dos objetivos principales:

    Proteger a la Völva. Ya que ésta, mientras practica el Seiðr no se encuentra en este plano, está en “el otro mundo” y por lo tanto,  puede sufrir de algunos males como caer enferma, o sufrir de epilepsia y hasta sangrar por la nariz de no tener ninguna protección, así que, en el momento de recitar el Varðlokkurse se evoca la protección de esta persona.

    Contactar a los espíritus. Según los datos del Varðlokkur en las sagas, se cree que los que le brindaron la información a la Völva son los espíritus del más allá, así que no es de extrañarse que se nombre mucho el “Viaje a Hel”, ya que se relata que la Völva realizó un viaje a Hel para contactar almas difuntas para contarles el futuro o lo que tuvieran por objetivo, así que en ese canto se llama a estos espíritus y se les pide por el propósito que la Völva quiere, se les honra y se les invita a mostrarle el camino, 

    Las Völvas también lo hacían a través de las Dísir (principalmente las Nornas), los Álfar y algunos Dioses, principalmente con Freyja ya que ella según las Eddas, fue la que enseñó el arte del Seiðr a los Æsir y a los humanos.

    En la saga Ynglinga se nombra a Freyja como una adepta a los misterios de Seiðr, y se dice también que fue ella quien enseñó a Odín.

“Dóttir Njarðar var Freyja. Hon var blótgyðja. Hon kenndi fyrst með Ásum seið, sem Vönum var títt”

“La hija de Njörðr era Freyja. Ella presidía sobre los sacrificios. Fue ella quien primero puso a los Æsir en conocimiento del Seiðr, que era una costumbre entre los Vanir”. 

 



2. ¿CÓMO ERA LA APARIENCIA DE LAS VÖLVAS?

    Pese a que las imágenes que encontramos nos las muestran como mujeres esculturales, femeninas, místicas, haciendo invocaciones, lanzando rayos y con cuernos, por estudios realizados a huesos provenientes de entierros vikingos, se ha determinado que las mujeres en promedio medían 1.58 cm y que sus facciones son menos “delicadas” que las de la actualidad, ya que contaban con mandíbulas y cejas mucho más pronunciadas.

    Respecto al cabello, era predominantemente rubio, rojizo pero también había población con el cabello oscuro.


    Las Völvas llevaban vestidos coloridos, probablemente habrían sido los mismos tanto para hombres como para mujeres. También usaban guantes y un sombrero de piel, y tenía una hermosa vara o bastón, algunos de madera cubiertos con latón, pudiendo estar decorado con hierro, bronce y piedras preciosas. (Se les conoce también como bastones mágicos). 

    Los arqueólogos escandinavos han descubierto varas en unas 40 tumbas femeninas, la altura de los bastones varían, se han encontrado de hasta 90 cm de alto.

    Este bastón o varita era un accesorio importante en la realización de Seidr y es el distintivo por excelencia de la Völva.  

    En sí mismo, el bastón está asociado con la adivinación y la magia sexual. Según el libro “El camino de los vikingos” fue utilizado por la Völva para entrar en éxtasis, como un medio para su espíritu viajara. Y dicho bastón o varita se encuentra relacionado con Odin


    Hay un mito que dice que si la Völva golpeaba tres veces tu mejilla con su varita, te borraría la memoria.


3. LOS ENTERRAMIENTOS DE VÖLVAS

    Se han encontrado enterramientos de Völvas por toda Escandinavia, y bastantes se encontraron con ropas o con objetos junto a ellos de valor significativo, lo que sugiere que se les consideraba importantes y de alto estatus, o al menos de un estatus superior al de un campesino normal. 


    También encontramos descripciones de otras fuentes sobre la Völva y sus prácticas rituales, por ejemplo, el diplomático Ibn Fadlan, menciona un ritual vikingo cuando observa un funeral vikingo en el Volga, que forma parte de la actual Rusia.

La Vidente/Völva de Fyrkat

    En Dinamarca, en la península de Jutlandia, en 1954, en la fortaleza anillada de Fyrkat, se encontró una tumba que pertenecía a una antigua Völva, que data aproximadamente del siglo IX, es decir, de principios de la era vikinga.

    La Völva que se encontró llevaba un vestido largo azul y rojo, con mangas largas blancas y un pañuelo en la cabeza con un hilo de oro en el borde. Llevaba anillos de plata en los dedos de los pies, algo muy poco habitual y que no se había encontrado antes en Dinamarca ni en ningún otro lugar de Escandinavia. La Völva fue enterrada encima de un carruaje tirado por caballos.

    La Völva fue enterrada con un broche de caja chapado en oro y hecho de plata, que contenía plomo blanco, que es un polvo blanco de una planta, se cree que el broche de caja es de Gotland. 

    Este plomo blanco se ha utilizado en Europa durante más de 2000 años en medicina, y es venenoso en su forma concentrada y si no se sabe lo que se está haciendo puede ser letal. También es posible que utilizara el plomo blanco como maquillaje, quizá en sus rituales Seidr.

    Los arqueólogos también encontraron una varita de metal, esta varita fue probablemente utilizada en sus muchos rituales Seidr.

    Llevaba un pequeño monedero con semillas de la planta venenosa beleño. Esta planta provoca alucinaciones, y podría haber formado parte de sus rituales, o incluso haber sido dada a los guerreros antes de una batalla. El beleño es conocido hoy en día por la mayoría de las personas que practican la brujería, se le conoce como bálsamo de bruja, te lo frotas en la piel para conseguir el efecto psicodélico.

    Otros objetos encontrados a sus pies eran egagrópilas de búho y huesos de aves y mamíferos. También había un amuleto de plata con forma de silla, ¿podría ser un pequeño modelo de su silla Seidr, donde practicaba su magia?



        Junto a ella había dos cuencos de bronce, que los arqueólogos creen que proceden de algún lugar de Asia central; estos cuencos podrían haber servido para mezclar los ingredientes cuando hacía pociones o alguna de sus otras recetas de Völva. Junto a ella había algunas pociones, pero no se pudieron identificar las mezclas.

    Esta tumba sólo puede significar que esta Völva era una persona muy importante y que probablemente significaba mucho para los lugareños. No era en absoluto pobre, y los objetos encontrados en su tumba sólo pueden significar que era de alto estatus, y probablemente tenía lazos muy estrechos con la realeza o los líderes

Enterramiento de Roskilde, (Dinamarca, ttumba, A505)

    Hay un caso bastante peculiar de una völva que fue enterrada con dos personas más, una mujer y un hombre. El detalle es que en la mujer que ambas mujeres estaban decapitadas, y la mujer que presumiblemente es la Völva, había sido enterrada con un caballo al cual habían sacrificado para el entierro, un feto de oveja y un perro partido a la mitad.

    Pero aquí viene otro detalle: sobre el entierro colocaron intencionalmente rocas muy grandes. Parece que querían asegurarse de que aquella mujer por nada saliera de esa tumba. 

    La práctica de decapitar o cortar la cabeza de un cadáver, es algo que se realizaba para que alguna bruja no pudiera regresar al mundo de los vivos. 

    Y lo que sabemos es que efectivamente las Völvas tenía mucho, mucho poder y conocimiento sobre la magia, por lo que era respetada y muy temida, y aquí tenemos evidencia de que no querían que una de ellas saliera de su tumba.


4. DESAPARICIÓN DE LAS VÖLVAS

    Las crecientes conversiones al cristianismo comenzaron a desplazar a la religión nórdica, llevando a la desaparición de la volva; con la ayuda de la Iglesia y de las leyes civiles promulgadas en su contra, como en esta ley canónica anglosajona:

"Si alguna bruja, mago, falso juramento, adorador de los muertos o alguna inmunda contaminada, se encuentra en cualquier parte de la tierra, el hombre los echará. Enseñamos que todo sacerdote debe extinguir el paganismo y prohibir la adoración de la fuente, encantamientos de los muertos, presagios, magia, adoración del hombre y las abominaciones que los hombres ejercen en diversos tipos de brujería, y en encierros de paz con olmos y otros árboles, y con piedras, y con muchos fantasmas."

--16ª ley canónica promulgada bajo el reinado de Edgar en el siglo X--

    Fueron perseguidos y asesinados en el curso de la cristianización, lo que también llevó a una reclusión extrema de las mujeres en la sociedad germánica.





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